A la luna
Fotografía de Miguel Cuenca (Alicante)
A la luna llena
Le cuento un cuento
No puede dormir
No tiene sueño
Me mira con pena
Cuando yo duermo
Quiere jugar
Si estoy despierto…
Y mamá me cantaba este poema, como las madres cantan todos los versos, con susurros de miel pegados a los labios y miradas entornadas de chocolate.
Y la luna llena nos observaba, sabedora de que hablábamos de ella, y yo extendía la mano hasta el cielo de mi cuarto y con un dedo dibujaba círculos de caricias para mi luna.
- ¿Quién vive en la luna? – Preguntaba entonces.
- En la luna viven los enamorados, y allí se guardan todos los sueños, hasta que vienen las estrellas a buscarlos.
Y la noche cerrada resplandecía, mientras yo cerraba los ojos y me dormía, pensando en la luna y sus habitantes.
Y ahora que ya he crecido, soy yo quien le canto a mis niños…
A la luna llena
Le cuento un cuento
No puede dormir
No tiene sueño
Me mira con pena
Cuando yo duermo
Quiere jugar
Si estoy despierto…
Y si la vida es oscura busco a la luna, y con el dedo le pinto una sonrisa.
Y le doy las gracias a mi luna llena, por tener siempre un hueco para mis sueños, hasta que mande una estrella para buscarlos.